Un helicóptero se estrella en un rascacielos de Manhattan y causa al menos un muerto
Un helicóptero se estrelló este lunes contra un rascacielos en Nueva York, en un accidente que se cree debido a un aterrizaje forzoso y que se cobró una víctima mortal, la de piloto que manejaba la nave.
El helicóptero se estrelló contra la azotea del edificio y ardió después de la colisión. Las autoridades confirmaron que el accidente solo tuvo una víctima: el piloto Tim McCormack. No se produjo ningún herido como resultado de la colisión ni del posterior incendio del helicóptero.
Nueva York vivía este lunes un día de intensas lluvias y escasa visibilidad, acompañados de vientos de alrededor de 20 kilómetros por hora.
Según las autoridades, McCormack despegó poco antes del accidente de un helipuerto en el lado Este de Manhattan, sobre la orilla del East River. Al parecer, el piloto estuvo esperando un rato a que las condiciones climatológicas mejoraran, pero por alguna razón decidió salir.
En un vuelo de unos once minutos, bajó hasta el Sur de Manhattan, dio la vuelta a la punta de la isla y puso rumbo hacia el Norte, sobre el lado Oeste de Manhattan, en la orilla con el río Hudson. La normativa aérea no permite a los helicópteros volar sobre Manhattan, deben hacerlo sobre ambas orillas de la isla, por donde cada día pasan cientos de helicópteros de vuelos panorámicos para turistas. También despegan de forma habitual helicópteros para trayectos corporativos, que llevan y traen a ejecutivos que buscan ahorrarse los atascos de entrada y salida a Manhattan. McComarck trabajaba en este tipo de vuelos, pero no llevaba a ningún cliente.
Por alguna razón todavía desconocida, tras pasar la calle 40 el helicóptero empezó a virar hacia el interior de la isla, hasta llegar al lugar del accidente en la calle 51 con la Séptima Avenida, una de las zonas más concurridas de la ciudad, a pocas manzanas de Times Square y de Central Park.
Tras el accidente, la policía cerró los accesos en varias calles adyacentes y el lugar se llenó de camiones de bomberos. El fuego que se declaró tras el accidente provocó una nube de humo, visible desde los alrededores, pero el incendio media hora después de la colisión, según ha informado la policía de la ciudad.
«La gente que estaba en el edificio asegura que sintieron una sacudida», aseguró el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, que no evitó una referencia al episodio más trágico de la historia de la ciudad. «Si eres neoyorquino, te queda cierto nivel de estrés postraumático del 11S, recuerdo demasiado bien esa mañana», dijo antes de señalar que no hay «ninguna indicación» de que hubiera un motivo similar para el accidente. «Las únicas sospechas es que fue un aterrizaje de emergencia o una accidente, nada más que eso».
«No hay ninguna indicación por el momento de que haya sido un acto de terrorismo y no hay ninguna situación de amenaza en Nueva York», añadió poco después el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio. «Hace décadas que los helicópteros no aterrizan en edificios de Manhattan», explicó De Blasio, en una decisión tomada después de un accidente en el edificio Pan Am -actual edificio Met Life-, en el que murieron cinco personas. La única excepción es para helicópteros de emergencia que aterrizan en hospitales.
El edificio del accidente de este lunes es la sede neoyorquina de la aseguradora francesa AXA, y aloja a otras compañías como BNP Paribas, Stifel o parte de las oficinas de Citigroup. El rascacielos está rematado por un cubo rectangular, donde al parecer el piloto trató de ejecutar el aterrizaje forzoso.
Varios trabajadores de los pisos más altos del rascacielos aseguraron haber sentido el golpe de la colisión del helicóptero con el edificio y relataron las aglomeraciones para evacuar sus puestos de trabajo.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, reaccionó al accidente desde Twitter, donde celebró «el fenomenal trabajo por nuestros maravillosos servicios de emergencia, que están ahora mismo sobre el terreno».
Tomado de https://www.abc.es