La evolución de la carga del móvil: inalámbrica y rápida

Quedarse sin batería en el móvil supone una absoluta desconexión con el entorno y un drama que en la vida real cuesta mucho asumir. Los fabricantes lo saben y se esmeran en proporcionar baterías cada vez más potentes, pero, sobre todo, sistemas de carga más eficientes y cómodos. En este sentido, la tecnología ofrece ya dos soluciones que las principales marcas están incorporando ya en sus móviles estrella: la carga inalámbrica (sin cables) y la carga rápida.

Existen toda una serie de mitos y falsas creencias en torno a estos dos sistemas de carga que consiguen que todavía una buena parte del mercado siga confiando en el sistema de carga tradicional, pero estos usuarios se están perdiendo las ventajas que proporcionan ambos sistemas de carga sin un motivo real o contrastado. ¿Cómo funciona cada sistema y qué ventajas proporciona?
La conveniencia de la carga inalámbrica

Uno de los mayores inconvenientes en los procesos de carga reside en lidiar con los cables; no solo por su peculiar capacidad de liarse, sino por el simple engorro de tener que cargar con ellos. Los cables exigen además adaptarse a los conectores que emplea el dispositivo a cargar, y sin son varios los que se llevan de viaje, puede resultar bastante problemático. La carga inalámbrica elimina de un plumazo todos estos inconvenientes e incorpora un elemento que logra seducir a todos los que lo prueban por primera vez: la comodidad de colocar el dispositivo sobre una base y olvidarse.

¿En qué consiste básicamente este sistema de carga? Este práctico método se compone de una base que emplea la inducción para cargar la batería del dispositivo que la soporta. La principal ventaja de este sistema es su comodidad puesto que basta con colocar el dispositivo sobre la base para que comience el proceso de carga. En el mercado, la mayoría de los móviles de gama media alta soporta este sistema de carga y fabricantes como Apple, incluso lo han añadido a sus populares AirPods. Con todo, la carga inalámbrica cuenta con ciertas desventajas sobre la carga mediante cable: la primera es que es menos eficiente debido a las elevadas pérdidas; la segunda reside en el sobrecalentamiento, pero realmente ninguna de ambas debería preocupar al usuario. Los expertos aseguran que los fabricantes protegen los equipos no permitiendo sobrecargas, siempre y cuando se usen cargadores homologados, y en este sentido, fabricantes como Apple explican que para “aumentar la vida útil de la batería si se calienta demasiado”, la carga se corta al 80%.
La carga rápida

¿Se imagina poder cargar la batería a la mitad en apenas 20 minutos? Esto es posible gracias a los sistemas de carga rápida, que, por resumirlo básicamente, introducen más ‘caudal’ de carga logrando acortar los tiempos. Al igual que sucede con la carga inalámbrica, los principales modelos de gamas media y alta soportan esta tecnología para conveniencia del usuario. Y también al igual que sucede con la carga inalámbrica, existen muchos mitos en torno a este sistema: el principal de ellos reside en creer, falsamente, que la batería se deteriora de forma prematura. Esta creencia es descartada de forma taxativa por Qualcomm, el principal protagonista en este sistema con su Quick Charge, argumentando que el fabricante de móviles conoce bien los límites tanto de la batería como del cargador y nunca los excede.

Qualcomm comercializa el sistema más popular, pero algunos fabricantes, como OnePlus, emplean tecnologías propias como Warp Charge, el sistema de ‘fast charge’ más rápido del mercado. El fabricante logra cargar la mitad de la batería de sus móviles en apenas 20 minutos, y lo hace empleándose a fondo en el cargador: “Esta tecnología transfiere la mayor parte de la administración de energía y concentra el calor directamente en el adaptador Warp Charge 30, de manera que consigue que el teléfono no se caliente y se pueda seguir utilizando de forma fluida”, explican desde OnePlus a EL PAÍS, descartando asimismo un posible daño en la batería mediante los procesos de carga rápida, “hay muchos mitos alrededor de este tema”, sentencian.

Tomado de https://elpais.com