El Tratado de Beijing, tabla de salvación para actores y músicos dominicanos

Concebido para garantizar hacer efectiva la retribución económica a los artistas intérpretes o ejecutantes de audiovisuales entró en vigencia el pasado martes

Santo Domingo. La entrada en vigencia en República Dominicana del Tratado de Beijing es la más grande conquista hasta el momento lograda para los actores, bailarines, músicos y cantantes dominicanos ya que reconoce sus derechos sobre interpretaciones y ejecuciones audiovisuales.

El tratado fue concebido para garantizar hacer efectiva la retribución económica a los artistas intérpretes o ejecutantes de audiovisuales -actores de televisión y cine, músicos, bailarines y otros- muchos de las cuales viven de trabajos esporádicos en circunstancias económicas precarias.

Amplía los derechos de los trabajadores audiovisuales sobre sus interpretaciones y ejecuciones, que pueden traducirse en un aumento de los pagos por difusión, un beneficio de importancia crucial dado que muchas nuevas producciones se han paralizado debido a la pandemia de COVID-19.

Chucky Acosta, presidente y Pochy Familia, secretario general, respectivamente, de la Sociedad Dominicana de Artistas Intérpretes y Ejecutantes (Sodaie), dieron a conocer la noticia ayer a representantes de medios de comunicación en un encuentro virtual a través de la plataforma de Zoom.

Ambos artistas, junto a directivos de la entidad, destacaron que este es uno de los tratados más importantes de los que el país es signatario.

Elaine Acevedo, de la Sociedad Dominicana de Artitas Intérpretes de Audiovisual (Sodinavi), explicó que el Tratado de Beijing es un instrumento de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI) que otorga derechos a los artistas que participan en una obra audiovisual.

Hasta el pasado martes, el actor o músico contratado para una obra audiovisual sólo percibía el monto que le pagaban por participar en la misma, pero a partir de la entrada en vigencia del tratado actores, actrices y músicos, pasarán a recibir una remuneración por difusión.

“Hay dos clases de derecho, el derecho moral, que me reconoce como participante de una obra y el patrimonial, que tiene que ver con lo económico, el derecho que tengo a recibir beneficios cada vez que esa obra se presente”, aclaró Acevedo.

De su lado, el abogado Joselito Bautista, asesor legal de cuatro sociedades de derecho de autoconexos, manifestó su alegría por la aprobación del tratado porque, dice, “viene a sumarse a una lista de tratados y convenios internacionales en beneficio del arte”.

“Debemos destacar que el tratado es un equilibrio entre los derechos morales y patrimoniales. Nuestra legislación decía que inmediatamente un artista firmaba con el productor entregaba sus derechos al mismo. Ahora el tratado de Beijing viene a ejecutar esa protección total al trabajador del arte y la cultura de manera permanente”, destacó Bautista.

“El tratado entró en vigencia y se ejecutará de inmediato a través de la Oficina Nacional de
Derecho de Autor (ONDA) y en poco tiempo los artistas estarán recibiendo los beneficios del mismo”, informó Pochy Familia.

El músico y director de orquesta destacó el apoyo y la entrega del doctor Trajano Santana,
director de la ONDA para la entrada en vigencia en República Dominicana del tratado.

El actor Johnnié Mercedes, presidente de Sodinavi, habló desde su propia experiencia y reveló que ha firmado contratos en los que se establece que cede todos sus derechos en todos los sentidos, incluyendo los del tratado de Beijing.

“Y eso no sólo pasa conmigo, ha pasado con todos y uno se preguntaba, ‘pero qué es eso,
Beijing’, y nada, firmaba. Hice una película donde me gané un buen dinero, pero como se va a estrenar en México, para 100 salas de cine, pude negociar que me dieran un porcentaje según la venta de la película en ese país, pero esa es una excepción a la regla”, explicó.

Mercedes destacó que con el Tratado de Beijing el hecho de la película proyectarse en todas esas salas de cine, el actor y el músico adquieren beneficios inmediatos por su trabajo.

En tanto, el productor de cine, director y guionista Robert Cornelio, quien representa a los

gestores de cine de la Sociedad Dominicana de Guionistas y Directores de CICE (SODOGDC), aseguró: “Es un tratado importantísimo para los actores por lo que celebro con júbilo la entrada del mismo y, sobre todo, que llega en un momento tan difícil para la gente del arte en tiempos de coronavirus”.

Francis Gurry, director general de la OMPI, considera que la entrada en vigencia del tratado

puede servir para mejorar los medios de vida de los actores y otros artistas intérpretes o
ejecutantes de obras audiovisuales, una circunstancia que cobra mayor importancia en medio de las repercusiones económicas negativas que han ocasionado en la producción cultural los efectos colaterales de la pandemia de COVID-19.

“Los intérpretes o ejecutantes de las series y películas que adoramos son esencialmente
trabajadores que cobran por actuación, sin sueldo a largo plazo, participación en los beneficios o fama reconocida. El Tratado de Beijing contribuye a otorgar más derechos sobre sus obras a estos artistas intérpretes o ejecutantes, lo que a su vez fomenta sus ingresos personales”, aseguró Gurry, en el portal de la OMPI.

Tomado de https://elnacional.com.do