Los demócratas acusan a Trump de abuso de poder y obstrucción
Los legisladores anuncian los cargos formales dentro del ‘impeachment’ por el escándalo de Ucrania
Los demócratas han acusado este martes a Donald Trump de abuso de poder y obstrucción al Congreso dentro del proceso de impeachment (o destitución) abierto contra el presidente a raíz del escándalo de Ucrania, tal como adelantaron la noche de este lunes varios medios estadounidenses citando fuentes legislativas. Después de una audiencia de nueve horas en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, legisladores y asesores se pusieron a trabajar en la redacción de los cargos, es decir, en los llamados artículos para el impeachment, con el objetivo de anunciarlos formalmente el martes por la mañana en rueda de prensa.
El impeachment, un procedimiento extraordinario contemplado en la Constitución de EE UU para destituir a un presidente cuando comete un delito o falta grave, ha echado a andar gracias a la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes, que es la que tiene la potestad de activarlo. La investigación comenzó el 24 de septiembre, cuando salieron a la luz las maniobras de Trump para lograr que la Justicia de Ucrania anunciase investigaciones que le favorecerían ante las elecciones presidenciales de 2020: una sobre su rival político, el exvicepresidente y precandidato demócrata Joe Biden, y su hijo Hunter, por sus negocios en aquel país; y otra sobre una teoría conspirativa de las elecciones de 2016 que perjudica a los demócratas.
El Partido Demócrata ha acusado a Trump de los cargos de abuso de poder y obstrucción, esta última, debida al torpedeo del presidente al proceso en el Congreso, negando documentos y declaraciones. Si se cumple el calendario oficioso, la votación en el pleno de la Cámara tendrá lugar la próxima semana.
La jornada empezó este lunes con la exposición de argumentos de los abogados de los demócratas, que alegaron que las pruebas de abuso de poder por parte de Trump resultan “abrumadoras” y su actuación supone un riesgo para las elecciones de 2020. Mientras, los asesores republicanos, que denunciaron la “obsesión” de los demócratas en deshacerse de Trump como sea. Por la noche, la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, se reunió con el presidente del Comité Judicial, Jerrold Nadler, y con el de Asuntos Exteriores, Eliot L. Engel, para poner en marcha la nueva fase del proceso.
Esta semana, los 41 legisladores del Comité Judicial analizarán las pruebas y, previsiblemente, votarán a favor de presentar cargos gracias a la mayoría demócrata (24 a 17) del comité. Acto seguido, el voto pasará al pleno de la Cámara, también controlado por los demócratas, y de ahí al Senado, donde la mayoría republicana puede absolver al presidente con facilidad.
La primera vez que la Cámara de Representantes tuvo que pronunciarse sobre este caso, el pasado 31 de octubre, para votar las reglas de juego por las que se regirá el procedimiento y poner en marcha su fase formal, ya evidenció lo tribal del asunto: 231 congresistas demócratas y un independiente votaron a favor de la investigación, mientras que 194 republicanos y dos demócratas lo hicieron en contra. En el Senado, donde hacen falta dos tercios de los votos para destituir a un presidente (67 de 100 escaños) el futuro está más o menos escrito, pues los republicanos son mayoría (53 votos, frente a 47 demócratas, incluyendo a dos independientes) y hoy por hoy no se prevén deserciones.
Nadler comenzó la sesión de este lunes acusando a Trump de haber “violado su juramento”, poniendo sus intereses personales “por delante de los del país”, mientras que el líder republicano de dicho organismo, Doug Collins, aseguró que los demócratas impulsan este proceso porque “no pueden superar el hecho de que Trump sea presidente y ellos no tengan un candidato capaz de vencerle” en 2020.
Dentro de la presión a Kiev, resulta clave esclarecer si el presidente de utilizó las ayudas militares y una reunión bilateral con el presidente Volodímir Zelenski como moneda de cambio para lograr sus fines con el objetivo de obtener réditos electorales ante las elecciones presidenciales de 2020.
Durante más de dos meses el Capitolio ha escuchado a testigos y revisado documentos. Barry Berke, consejero legal que representa a la mayoría demócrata, consideró este lunes “abrumadoras” las pruebas de que “el presidente abusó de su poder”. “Y al abusar de ese poder, traicionó los intereses nacionales, está claro que el presidente se arriesgó a corromper nuestras elecciones”, recalcó, durante una comparecencia en la que fue intercalando fragmentos de vídeo con declaraciones de algunos de los testigos que han pasado por el Congreso. Para el abogado de los republicanos, Steve Castor, las acusaciones, por el contrario, no arrojan pruebas concluyentes y demuestran que los demócratas “están obsesionados con destituir a Trump como sea”.
Una conversación telefónica entre Trump y Zelenski el pasado verano demuestra que el estadounidense pidió insistentemente a su homólogo ucranio que iniciara las investigaciones, aunque los republicanos defienden que lo hizo de buena fe, preocupado por la corrupción, sin ofrecer contrapartidas. Otros diplomáticos y asesores sí señalan que se usaron las ayudas militares -que pasaron más de un mes congeladas sin explicación- y la reunión entre los mandatarios como moneda de cambio, una presión canalizada a través del abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, pero sin registros de una orden directa y explícita por parte del mandatario.
Tomado de https://elpais.com