Luis “El Gallo” pide fortalecer cultura, educación y religiosidad en la frontera
El presidente de la Unión Demócrata Cristiana –UDC-, Luis Acosta Moreta, Luis “El Gallo”, propuso hoy que se trabaje en fortalecer la cultura, la educación y los sentimientos patrios en los pueblos de la zona fronteriza, sometidos a la influencia de los haitianos.
Afirmó que debido a un abandono ancestral, que ahora se comienza a corregir, los pueblos de la frontera han estado abandonados en el desarrollo cultural y religioso, por lo que pueden ser víctimas de la penetración cultura haitiana.
Afirmó que el presidente Luis Abinader está tomando las medidas para lograr el desarrollo económico y cultural de la frontera, que es una de las principales vías para detener cualquier penetración del atraso y una cultura que no es la nuestra..
Señaló que al mandatario no se se le puede dejar solo en esta labor, para adecentar y desarrollar la frontera, que es por donde arranca la territorialidad, y donde en muchas batallas, se ha afincado el patriotismo nacional.
Aseguró que todos los dominicanos deben dar su respaldo al presidente Abinader, y aunar esfuerzos para que, conjuntamente con la frontera cerrada y la crisis del masacre, se afiance el principio de que en este país no pueden ondear dos banderas, ni escucharse dos himnos.
Apuntó que a la frontera, bajo estricta vigilancia de los guardias dominicanos, tienen que ir los gestores culturales, los profesores de ideas renovadas, las iglesias, y mejorar la rccepción de las emisoras y televisoras dominicanas cuya síntonía se pierde en el camino.
Destacó que no puede haber descuido en levantar las fibras patrióticas en la frontera, porque sus moradores, lejos de las principales ciudades, se sumergen, en muchas ocasiones, en una mezcla cultural que es muy perjudicial.
Aseguró que se ve en la frontera casi como normal que las personas bailen y canten una variadad de merengues haitianos, los cuales amenazan con minimizar los aires autóctonos.
Afirmó que desde hace años la UDC ha estado trabajando en conjunto con sectores religiosos, para implementar programas de formación espiritual que ponga una muralla al vudú y a la brujería, propios del lado haitiano de la frontera.
Añadió que hay una situación de emergencia en la frontera, en lo que se refiere al patrón cultural, ambientada con el comercio entre los dos países, las ferias de venta de alimentos y la camaraderia que en ocasiones surge entre los excluidos.
Destacó que la responsabilidad de validar las fibras nacionales a todo lo largo de la frontera, y rechazar cualquier asomo de penetración cultural y religiosa de haití, es una responsabilidad de todos los dominicanos.