Un encuentro en Madrid, crucial en la investigación para el «impeachment» de Trump
¿Envió el presidente de Estados Unidos a su abogado personal a Madrid en agosto para obligar a Ucrania a investigar a su rival demócrata Joe Biden a cambio de desbloquear ayudas militares de más de 400 millones de dólares? Ese reciente encuentro está en el centro de una investigación anunciada el martes por la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, para decidir sobre la recusación o «impeachment» de Donald Trump.
El presidente estadounidense revelará este miércoles la totalidad de la llamada que mantuvo el 25 de julio con su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, en el cargo desde mayo. Según denunció un funcionario anónimo que escuchó la llamada (algo habitual y rutinario en la Casa Blanca), Trump hizo una promesa preocupante a Zelensky, algo que podía ser constitutivo de delito. Por eso este funcionario presentó una queja ante el Inspector General del gobierno.
La queja acabó en el Capitolio, una de cuyas dos cámaras, la de Representantes, controlan los demócratas. Estos abrieron una investigación sobre las promesas de Trump a Ucrania. Durante las pesquisas, los demócratas hallaron que Trump envió a su abogado, Rudy Giuliani, a Europa en dos ocasiones este verano: en junio a París a verse con un fiscal de la administración ucraniana, y en agosto a Madrid, para verse con un asesor de Zelensky.
Por aquel entonces, Trump había decidido demorar el envío de ayudas militares por valor de 400 millones de dólares (363 millón es de euros) al gobierno de Ucrania, a pesar de que una mayoría de ellas habían sido autorizadas por el Capitolio. Ucrania sufre desde 2014 una agresión armada de Rusia, que se ha anexionado la península de Crimea y mantiene abierto un conflicto en las provincias orientales de Lugansk y Donetsk.
La sospecha de los demócratas es que en la reunión en Madrid, Giuliani ofreció al abogado ucraniano Andriy Yermak, cercano al presidente de su país, desbloquear las ayudas si la fiscalía ucraniana investigaba a Biden.
La razón de esa petición es que, en 2016, Biden, entonces vicepresidente de EE.UU., amenazó con rescindir 1.000 millones de dólares en garantías de crédito si el gobierno ucraniano, que entonces presidía Petró Poroshenko, no despedía al fiscal general, Víktor Shokin, acusado de corrupción. Este había investigado la empresa Burisma, dedicada al suministro de gas, en cuyo consejo de administración servía un hijo de Biden, Hunter.
Shokin fue despedido, y las garantías de crédito fueron aprobadas después. Según Trump, Ucrania debería investigar las acciones de Biden porque estas pueden ser delictivas y un ejercicio de nepotismo.
Nunca antes un presidente de EE.UU. ha pedido a un gobierno extranjero que investigue las acciones de un miembro de un gobierno anterior. Se da la circunstancia de que Biden lidera las encuestas en el campo de primarias demócratas para las elecciones que se celebrarán en un año, en las que Trump se juega la reelección.
Sobre el encuentro en Madrid, Giuliani ha dicho que el departamento de Estado le pidió que hablara con el abogado Yermak. «El departamento de Estado me llamó para pedirme si podía hablar por teléfono con el señor Yermak, que era el número dos o número tres del presidente Zelensky», dijo el lunes en la cadena de televisión Fox News. Giuliani, que entre 1994 y 2001 fue alcalde de Nueva York, trabaja a título privado para Trump, y no es funcionario o diplomático en activo.
Tomado de https://www.abc.es